MEDIACIÓN CIVIL Y MERCANTIL

La mediación es un método alternativo para la gestión y resolución de conflictos entre dos o más partes, con la ayuda de una persona profesional de la mediación. La mediación es, por tanto, un sistema alternativo mediante el que las partes involucradas en un conflicto lo tratan de resolver por sí mismas, con el apoyo de una tercera persona imparcial que actúa como conductora en las sesiones, facilitando a las partes el encuentro de una solución satisfactoria para ambas.

TIPOLOGÍA DE CONFLICTOS QUE PUEDE RESOLVER LA MEDIACIÓN CIVIL Y MERCANTIL:

  • Interpretación de cláusulas contractuales.
  • Incumplimientos contractuales (contratos de compraventa, permutas, arrendamientos de cosas, servicios u obra, préstamos o financiación, mandato o representación, etc.)
  • Conflictos relativos a la titularidad y el ejercicio de derechos reales (propiedad, usufructo, derechos reales de garantía, servidumbres, etc.).
  • Conflictos en el seno de sociedades, asociaciones o fundaciones.
  • Entre empresas de un grupo o filiales.
  • Con clientes y/o proveedores.
  • Con otras empresas en materia de competencia desleal, propiedad industrial, incumplimientos contractuales, reclamaciones de responsabilidad extracontractual, … etc.

BENEFICIOS DE LA UTILIZACIÓN DE LA MEDIACIÓN CIVIL PARA LA RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS:

La mediación civil y mercantil son una herramienta valiosa para resolver conflictos entre particulares, socios, proveedores y clientes. En la mediación las partes en conflicto trabajan con un tercero para encontrar una solución de mutuo acuerdo. Este enfoque tiene una serie de ventajas sobre el proceso, como la reducción de costes, una mayor flexibilidad y la posibilidad de que ambas partes se vayan con la sensación de haber ganado. Por estas razones, la mediación civil y mercantil se utiliza cada vez más como alternativa viable a las batallas judiciales tradicionales.